La experiencia gastronómica de una influencer en Nosara: ¢27 mil por un desayuno tradicional
Una vivencia inesperada en Guanacaste
La influencer costarricense Karo Céspedes, reconocida como “Karo Trips” por sus contenidos sobre turismo y gastronomía, compartió en sus redes sociales una experiencia que ha dado mucho de qué hablar. Durante una visita a Nosara, en la provincia de Guanacaste, pagó ¢27,538 por un desayuno tradicional que incluía dos gallo pintos, un café y un jugo de naranja.
El elevado precio sorprendió a Karo, quien comentó que un desayuno similar en otras regiones del país suele oscilar entre ¢3,000 y ¢5,000. Sin embargo, explicó que eligieron el restaurante por su ubicación destacada en Google Maps, lo que despertó su curiosidad.
Un desayuno con vistas y sabor
La influencer documentó su experiencia en un video donde mostró el ambiente del restaurante, su ubicación privilegiada frente a la playa y el menú que ofrecía desayunos variados. Al revisar las opciones, descubrió que el gallo pinto costaba ¢9,000 antes de impuestos y sin incluir las bebidas.
El plato, según describió, era bastante completo: huevo, aguacate, plátano maduro, natilla, tortilla y pico de gallo. Al recibirlo, señaló que tenía una presentación agradable y que el sabor estaba a la altura de las expectativas.
Sin embargo, la sorpresa llegó al final, cuando la cuenta reveló un total de ¢27,538. En el video, Karo exclamó: “¡Jamás!”, dejando claro que, aunque disfrutó la comida, el precio fue inesperado.
Reacciones de sus seguidores
El video provocó una avalancha de comentarios. Mientras algunos seguidores compartían su asombro por el alto costo, otros consideraron que los precios son habituales en Nosara, una zona turística conocida por atraer a visitantes internacionales.
Un detalle adicional que generó conversación fue el precio del jugo de naranja, que alcanzó los ¢4,388. Aunque Karo destacó que la comida estaba deliciosa, calificó la experiencia como “el pinto más caro de mi vida”.
El contexto detrás del restaurante
Según explicó Karo en el video, el restaurante es propiedad de una costarricense casada con un extranjero, lo que podría influir en la orientación de precios para una clientela mayoritariamente turística.
Reflexión: ¿pagarías ese monto?
El caso abre un debate sobre los costos en zonas turísticas de Costa Rica y la percepción de los consumidores locales frente a los visitantes internacionales. Si bien algunos justifican los precios por la experiencia y la ubicación, otros cuestionan si realmente es accesible para el público costarricense.
